JUAN CARLOS LAYTON
LA PATRIA | MANIZALES
Manizales tiene un retraso de por lo menos tres años en su actualización catastral o registro de los inmuebles que se han construido, transformado o mejorado en la región en este tiempo.
La ciudad está entre las regiones del país con mayor índice de la construcción en los últimos años, y cerca del 53% de la actividad equivale a vivienda, en especial propiedad horizontal. No obstante, constructores y el propio Municipio señalan al Instituto Geográfico Agustín Codazzi (IGAC) de retrasos e inconvenientes, por la mala actualización.
Las secretarías de Planeación y de Hacienda estiman que el freno es tan evidente, que Manizales ha dejado de percibir, por concepto del impuesto predial, unos $4 mil millones anuales.
El secretario de Planeación, José Fernando Olarte, estima que es una cifra conservadora. Podría ser mayor, si se tienen en cuenta los problemas a propietarios que, luego de unos dos años, aún no tienen su ficha catastral.
Un impuesto globalizado
Santiago Robledo Restrepo, gerente de la firma Constructora Urbano y miembro de Camacol, coincide con esa denuncia. Dice que al no poseer su ficha catastral un propietario se pone en aprietos para vender posteriormente el inmueble o simplemente para pagar su impuesto predial.
El proceso marcha bien en las etapas previas, como el reglamento de propiedad horizontal, los planos en los que se establecen los linderos y demás trámites que lleva el constructor ante una notaría y la Oficina de Registro de Instrumentos Públicos, hasta tener las matrículas inmobiliarias.
El dolor de cabeza, asegura, comienza cuando se llega al IGAC para solicitar la ficha catastral de los diferentes apartamentos y efectuar el avalúo catastral de cada propiedad.
Un ejemplo específico se da con el edificio Montserrat. Sus 39 propietarios siguen sin la identificación catastral de sus bienes, pues no se ha hecho lo que técnicamente se conoce como un desenglobe del edificio, para hacer el cobro del predial por apartamento.
Sin embargo, en una tarea que parece de afán, el IGAC avaluó todo el edificio, por lo que el impuesto predial general de toda la propiedad le llegó a la firma constructora.
Los documentos que ha recibido, avalúan toda la propiedad en $7 mil 553 millones. Por ende, el cobro que le hizo el Municipio de impuesto predial asciende a los $17 millones bimensuales.
"Esta escritura es del 6 de marzo del 2013, hoy estamos a 18 de septiembre del 2014 (ayer) y todavía no ha pasado nada, cuando lo normal es que cada apartamento debería tener su ficha y su propio avalúo catastral y hoy seguimos en las mismas, me sigue llegando a mí", reclama.
Cambios en el sistema
La entidad señalada reconoce los problemas. Su director, Heynar Jaramillo Aragón, explica que el problema se ha generado debido al cambio de metodología.
"Este año hemos tenido una dificultad para atender de manera oportuna los trámites para asignar las fichas prediales, sobre todo en propiedad horizontal de edificios y condominios, debido a la adopción del nuevo Sistema Nacional Catastral".
Su explicación se centra en que este nuevo aplicativo se adoptó solamente en cuatro territoriales, incluyendo Caldas, Quindío, Risaralda y Córdoba, y Soacha (Cundinamarca). Esto ha generado tropiezos y dificultades para su aplicación.
Hacienda y Planeación, al contrario, sostienen que el proceso se lentificó hace unos tres años.
Para Manuel González, secretario de Hacienda, el problema también tiene que ver con el personal del IGAC que no está respondiendo a la incorporación de predios.
Su malestar se debe a que esto atenta no solo contra los constructores, al tener que hacerles unos cobros globales y afectar su patrimonio, sino contra el Municipio que, en ocasiones, sigue cobrando por el valor de un lote, pese a que hace mucho lo dejó de ser, pues no se actualizó el predio.
Resalta que aunque estos avalúos globales se pueden solucionar con los constructores, para que no pierdan su plata, el Municipio sigue vulnerado por aquellos predios donde no ha llegado el IGAC.
"El municipio está perdiendo plata, y perder plata significa que se tienen menos recursos para inversión". El estimativo de recaudo que tiene Manizales este año, asciende a los $51 mil millones, que podrían ser $55 mil millones, si se tuviera una buena actualización.
No hay improvisación
El temor de Camacol es que en la región se están registrando ventas anuales de nuevas edificiaciones cercanas a los 2 mil predios, unos 160 por mes, pero el retraso catastral podría impactar este sector, que es hoy el principal jalonador de la economía regional.
El IGAC niega esto. Dice que el Instituto ha trabajado para que haya recursos para el Municipio, y que no se puede quejar. Por eso defiende los avalúos globales e insiste en que no es improvisación.
Asegura que puede ser un proceso dispendioso, pero el problema se puede solucionar temporalmente entre el constructor y los copropietarios. "Ahí es donde viene el civismo de las personas. Si como propietario sé que debo pagar el impuesto por mi vivienda que adquirí hace uno o dos años atrás, y por alguna razón no me llega el predial, por qué no me siento con el constructor y se hace esa división de lo que debo pagar todos". "Ahí es donde viene el problema de la poca concertación y de tanto de lo que se ha hablado en este país de concertar, convivir y demás".
Insiste en que el sector constructor no va a perder ese dinero, pues luego se hará el proceso de desenglobe y le llegará el avalúo catastral e impuesto predial a cada propietario. "Primero existieron las relaciones entre los hombres y luego las leyes y las normas", resalta.
Para Santiago Robledo es muy grave, pues en su caso pasó de pagar un predial bimensual de $1 millón 791 mil, por el lote que tenía, a $17 millones en el mismo período, por una obra, que ya no es suya. Que debe asumir cada propietario.
Este no es un problema particular. El IGAC reconoce que hay unas 40 propiedades a las que les han tenido que hacer actualizaciones globales. Pese a ello, confía en que se tendrá un mejor sistema, en la medida en que se superen los problemas técnicos y se cuente con la ayuda de entidades como la oficina de Informática y Telecomunicaciones, a la cual le envió una carta, en la que pide una visita.
Advierte, eso sí: "nunca vamos a estar completamente al día". Su razón, la llegada continua de nuevas propiedades.
Para el Municipio, la única tarea es insistir ante la Dirección Nacional del IGAC para fortalecer el equipo regional, e incluso proponen crear oficinas regionales de catastro, con el fin de que se solucione pronto este problema, que es nacional, pero en el que Manizales está en primera fila.
"Ni para el IGAC, ni para rentas municipales existe un desenglobe, aunque ese edificio y esos apartamentos no me pertenecen. No tengo ninguna propiedad allí. Aunque hablo con el IGAC cada ocho días, no hay soluciones y muchos propietarios creen que el problema es mío".
Santiago Robledo Restrepo, gerente de la firma Constructora Urbano.
"Lo que es un incoveniente es que ni siquiera están reportadas como una mutación de su ficha catastral inicial que era el lote, y eso nos hace perder mucho dinero para financiar proyectos sociales, de infraestructura vial o cofinanciar proyectos con el Gobierno Nacional".
Manuel González, secretario de Hacienda
"Camacol nos ha solicitado, con toda razón, esta actualización, pero se nos sale un poco del manejo de la territorial Caldas, porque en sí el manejo, control y ajustes vienen desde Bogotá, motivo por el cual esperamos que nos asista en las mejoras que debe tener el sistema", resalta.
Heynar Jaramillo Aragón, director del IGAC
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