Osvaldo Hernández
LA PATRIA | Manizales
El 31 de julio del año pasado, hace nueve meses, debió empezar en el país el control en los estadios a las barras bravas.
La Ley 1270, de 2009, establece que la Comisión Nacional para la Seguridad, Comodidad y Convivencia en el Fútbol (CNSCC), debe diagnosticar las causas de la violencia en este deporte y proponer soluciones acordes con las expresiones del barrismo social.
La misma norma contiene el Estatuto del Hincha, "para promover la convivencia en el fútbol profesional, proteger los derechos del aficionado y el cumplimiento de sus deberes".
En lo que tiene que ver con las barras, la Ley ordena crear un sistema de registro que les permita a los clubes contar con la información de todos los miembros de las barras. Sin embargo, casi un año después el fútbol ve que esos grupos de apoyo que nacieron a comienzos del 2000 hacen y deshacen sin que las autoridades tengan el mecanismo que les permita ejercer el control ideal.
El lunes pasado, por ejemplo, en el estadio Hernán Ramírez Villegas, de Pereira, la barra Lobo Sur generó todo tipo de disturbios, con agresiones, policías lesionados y daños materiales sin que haya responsables directos.
Dimayor: sí, pero no
Ramón Jesurum, presidente de la Dimayor, dijo que la situación ha sido compleja y que por eso no se ha puesto en marcha: "no es fácil, hemos buscado los mecanismos y estamos trabajando sobre eso para salir adelante".
Explicó que no tiene ni idea de los costos porque lo harán con lo más avanzado en tecnología: "debe valer mucho y me imagino que si es por el bien del país, el fútbol y el Gobierno nos debemos comprometer".
El máximo dirigente de la rama profesional recalcó que será un sistema único nacional: "no queremos equivocarnos o improvisar, por eso pedimos un plazo adicional para empezar a operar como lo exige la Ley 1270. Se tomaría el modelo de Inglaterra".
Iván Novela, gerente de la Dimayor, lidera el programa en el país: "no hemos avanzado porque aún no se ha definido con el Gobierno, las alcaldías y los clubes el sistema que se montará".
Sin embargo, Novela dijo que trabajan en dos proyectos que no puede hacer públicos y que se conocerán en el momento oportuno.
No obstante, la lentitud en Dimayor, algunos clubes y barras, por sus propios medios, han empezado a buscar los mecanismos ideales para identificar a los barristas.
Unidad de criterios
Aficionados y clubes admiten que si no hay unidad de criterios, el esfuerzo individual se quedará corto: "nada me gano con crear mi carné o mecanismo local, si en un clásico con Nacional pierdo el control sobre los hinchas del visitante, o mis hinchas pierden el control en otra plaza", explica Óscar Astudillo, presidente del Deportivo Cali.
Un exdirectivo del Once Caldas dijo que ese tema ha sido un saludo a la bandera: "mientras estuve, se hizo muy poco. Reuniones, los mismos problemas, las mismas soluciones y nada más".
Paula Andrea Sánchez, secretaria de Gobierno de Manizales, explicó que nacionalmente se ha avanzado poco: "por eso, decidimos, por orden y seguridad, carnetizar a las dos barras".
La funcionaria agregó que sacarán tarjetas inteligentes personalizadas y lectores electrónicos, los cuales permitirán tener control sobre los fanáticos. El costo sería de $30 millones.
"Esperamos que cuando salga el sistema nacional, seamos homologados, pero igual, tenemos una responsabilidad y autonomía de responder por la seguridad del Municipio", manifestó Sánchez.
Juan Sebastián Gómez, concejal de Manizales y líder de Holocausto Norte, aseguró que no se ha logrado nada: "hemos hecho más nosotros acá, que ellos allá en Bogotá. Tenemos la plata, pero lo ideal es que hablemos el mismo idioma. Creemos que un carné es muy fácil de falsificar y que la huella lo ubicaría a uno en cualquier escenario del país". Indicó que en Manizales ni siquiera hay comparenderas para reseñar a quien viola la norma.
Como ejemplo cuenta que la barra hizo sancionar a un hincha porque ingresó a la tribuna norte con un cuchillo y atracó a varios aficionados. Lo señalaron, lo sacaron, lo sancionaron y cada que el equipo jugaba en el Palogrande, ese fanático se debía reportar con la estación de Policía.
Rexixtenxia Norte, lista
Sebastián Rondón, líder de Rexixtenxia Norte, del Independiente Medellín, dice que ellos son modelo en el país: "somos 2 mil fanáticos carnetizados. La tarjeta es individual y recargable, tenemos la autorización de Gobierno y Hacienda de Medellín. Eso nos ha permitido mantener un control, detectar y expulsar a quienes llegan en busca del desorden". Él no ve con buenos ojos la propuesta de la Dimayor de una carnetización única porque considera que detrás se viene un negocio para el fútbol.
Otra cosa que denunció el hincha del DIM fue que los funcionarios de las secretarías de Gobierno desconocen el Estatuto del Hincha: "cada semana vemos arbitrariedades", asegura Sebastián.
Aunque suene curioso, las barras le están dando ejemplo a la dirigencia del fútbol, buscando los mecanismos para que las autoridades los puedan controlar antes, durante y después de los partidos.
Lo que dicen los clubes
Óscar Astudillo (Deportivo Cali)
Esperamos que Bogotá diga algo porque creo que cualquier esfuerzo que se haga en cada ciudad no tendría sentido. Lo cierto es que nos cogió la tarde.
Álvaro López (Deportivo Pereira)
Hemos adelantado porque tenemos a nuestra barra carnetizada. Localmente hemos hecho el esfuerzo.
Ricardo Hoyos (Chicó)
En el caso nuestro, aunque la barra es pequeña, tenemos un carné que nos indica quiénes son, dónde viven. Del tema no se volvió a hablar.
Opinan en Manizales
¿Cómo ve la idea de que se registre con documento a todos los que vayan a un estadio?
Germán Loaiza
No lo veo viable, es muy complejo para todos, sobre todo porque los equipos aún son primarios en el manejo. Si lo hacen, hay que cumplir con la ley.
José Jaír Castaño
Es muy complicado, pero cualquier control que se haga no sobra, porque mientras sea para darles garantías a los asistentes todo es bueno.
Carlos Jaramillo
En un alto porcentaje los que venimos a fútbol somos gente de bien. Que controlen a los que son generadores de violencia, pero no a nosotros.
Mónica Aguirre
Excelente, es una manera de controlar a todas las personas que van a los estadios. Si eso es lo ideal para ir a fútbol en paz, bienvenido.
Juan Manuel Cañas
Excelente, es una forma de controlar la delincuencia que vemos hoy alrededor del fútbol. Mucha gente no viene por temor.
Juan Carlos Orozco
Es una medida buena, seguro que evitaría tanta violencia porque habría control sobre cada uno de los aficionados. Es una decisión sana.
Pedro Claver González
Es bueno en medio de esta ola de inseguridad que vive la sociedad, pero más aún en el fútbol. Ojalá se identificaran a todos los espectadores.
Piedad Villa
Me parece muy bien porque por falta de seguridad en los estadios y sus alrededores la gente no va.
Carolina Montoya
En este momento veo todo bien, quizá, teniendo un control más estricto nos sentiremos mejor.
Guillermo Escobar
Es una buena medida, pero lo veo complicado. Quizá es más viable para las barras. Ojalá se llegara a esto y mejoráramos mucho.
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