Embriagados de felicidad por el triunfo colombiano

Ricardo Patiño

LA PATRIA | MANIZALES

La venezolana Marielena Peñuela y el checo Martín Hájek fueron ayer más colombianos que nunca. Poco les importó ver de pie el partido de la Selección ante Polonia en la zona de El Cable, de Manizales. Valió la pena la incomodidad después de los goles de Yerry Mina, Radamel Falcao García y Juan Guillermo Cuadrado que pusieron a delirar a un país.

A esta pareja de extranjeros solo les faltó la camiseta tricolor, porque sus corazones estaban pintados de amarillo, azul y rojo. Ella, con la gorra venezolana, sintió como propia la goleada colombiana.

"Me emociona mucho ver la gente así. En mi país también disfrutan el fútbol, pero no tanto como acá. Este país lo quiero mucho porque soy hija de padre colombiano y me abrió las puertas para trabajar por la crisis en mi patria", comentó Marielena, que llegó hace siete meses a la ciudad.

Martín, profesor de inglés, no solo se enamoró ayer del fútbol de Colombia, sino del país. Le encanta la comida, la naturaleza y difícilmente lo olvidará porque le dio la posibilidad de conocer a su novia. ¿Cuánto se quedará en el país? "Toda la vida", sonríe mientras se ve sorprendido por el licor que consumen los aficionados.

Con el corazón a mil

El tráfico ayer fluyó por las principales vías de la ciudad. Las calles lucieron solas, en su gran mayoría, mientras que en las discotecas el negocio fue para sus propietarios. En Zambuca, en la Avenida 12 de octubre del barrio Chipre, las jirafas de cerveza se acabaron y a algunos aficionados no les quedó otra que pedir aguardiente o ron.

La espuma tampoco faltó. El gol de Yerry Mina, que abrió el marcador, bañó de felicidad a los hinchas que mantienen vivas las ilusiones de ver a la Selección en octavos de final. El jueves debe vencer a Senegal para clasificar.

Pocos se perdieron detalles del encuentro. Era ganar o ganar. Tres policías en Chipre estuvieron firmes a la pantalla del televisor y en la celebración del primer gol se emocionaron como los 50 millones de colombianos.

Ayer, las vuvuzelas sonaron más de la cuenta, el Colombia tierra querida fue la canción más pedida, mientras muchos aficionados se embriagaron de alegría. Marielena Peñuela y Martín Hájek, los protagonistas de esta historia, también se unieron a la fiesta y regresaron a su casa con el corazón tricolor.

Faustino Cacais, tolimense

Emocionado con este triunfo. Casi se me sale el corazón.

Sandra Quintero, Cervantes

Genial todo. La ilusión sigue intacta para clasificar.

Carlos Alzate, El Caribe

Excelente el triunfo. Este Mundial es nuestro.

Carlos Arturo Ortiz, El Aguacate

Colombia mostró jerarquía y buen estado de forma.

Luis Fernando Aristizábal, La Enea

Una verraquera este triunfo, lástima esa derrota en el primer partido con Japón.

La frase

"Estamos felices, pero hoy Colombia está eliminado, hay que trabajar por más", José Pékerman, técnico de la Selección Colombia.

La cifra

8 victorias completó Colombia en sus participaciones mundialistas.

Abierto el grupo

Japón y Senegal, líderes del grupo H, empataron ayer a dos tantos en un duelo atractivo en el central de Ekaterimburgo, donde los nipones pusieron más dominio y ocasiones, pero los africanos dieron una lección de eficacia.

Puso más fútbol Japón, que tras su victoria en la primera jornada frente a Colombia sueña con su tercera clasificación para octavos, al igual que Senegal, que venció a Polonia y que también tiene opciones de llegar por tercera vez a esa fase.