Osvaldo Hernández
LA PATRIA | Manizales
El Mundial de Estados Unidos 1994 fue, literalmente, un baldado de agua fría para Alexis García y René Higuita. Dos pesos pesados del Atlético Nacional que no fueron llamados por el técnico Francisco Maturana para integrar el combinado nacional.
Ese fue un golpe duro para las dos figuras verdes que veían cómo el país se ilusionaba con su Selección Colombia, considerada en ese momento como favorita para ganar el Mundial. Ese fue el equipo que goleó 0-5 a Argentina en el Monumental de Buenos Aires.
René y Alexis se refugiaron en sus hogares para pasar ese trago amargo.
Entonces les llegó la invitación de un aficionado del Atlético Nacional para llevarlos a Yopal (Casanare). Fue así como vivieron la experiencia que, para Alexis García, ex volante del Once Caldas, es un de las mejores en su amplia carrera deportiva.
"Estábamos tristes, fuimos a todas las batallas con la Selección y no entramos en la lista del Mundial. En medio de esa tristeza apareció la invitación para ir a Yopal, nos daban todo y mucho dinero; fue como un homenaje de desagravio. Así lo sentimos.
El loco, así le decimos por amistad y cariño a René, toda la vida ha sido muy dormilón. En las concentraciones, Pacho Maturana y Bolillo Gómez nos llevaban de la mano a su habitación ver cómo dormía. Ese man es un ejemplo de tranquilidad y los partidos podían ser muy bravos, pero él dormía y dormía, solo se levantaba a comer y a los compromisos con los técnicos.
Todo lo contrario era Andrés Escobar. No podía conciliar el sueño y entraba a las habitaciones y se le tiraba a uno encima.
Arrancamos hacia Yopal, el vuelo nos llevó primero a Bogotá. Allá abordamos un avión muy viejo, bueno, esa era la impresión que daba y de inmediato René se quedó dormido. Ni siquiera había alzado vuelo y ya dormía.
Íbamos a salir cuando explotó un motor del avión. Todo el mundo entró en pánico, menos René, que seguía dormido; no sentía nada.
La gente se asustó y yo desperté a René cuando vi que venían los bomberos y le dije lo que estaba pasando. Me respondió..."te dije que estos aviones no son buenos", se acomodó de nuevo y siguió durmiendo, como si no pasara nada.
Nos tocó despertarlo para que se bajara del avión. Fue algo increíble que viví no solo por el susto, sino también, por la tranquilidad de un tipo como René, que tiene esa capacidad de usar el sueño como antídoto para cualquier situación.
Bueno, quizá no lo usa a propósito, pero duerme tan profundo que ni un incidente como ese lo pudo despertar.
Horas después hicimos el viaje a Yopal. Fuimos recibidos en carro de bomberos, nos exhibimos como reinas y vivimos dos días mágicos en esa ciudad, por la gente y la ciudad como tal.
Alexis García es entrenador de Equidad y René Higuita es preparador de guardametas del Atlético Nacional.
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