Colombia tendrá una prueba de carácter

Colprensa | LA PATRIA | Kazán (Rusia)

El terreno del Mundial ya no está plano para Colombia. La derrota contra Japón puso cuesta arriba las aspiraciones de la tricolor. Ahora los futbolistas deberán copiar la garra de los escarabajos que se lucen cuando la carretera se inclina y llega la montaña.

“Hay que ser muy fuertes mentalmente, saber que son sólo tres partidos, tres finales y nos quedan dos”, reconoció el lateral izquierdo del Girona de España, Johan Mojica.

Todo el panorama para la Selección es complejo. La montaña que se atravesó desde los tres minutos de presencia mundialista en Saransk impactó a los dirigidos por José Pékerman, quien ahora debe liderar la recuperación de sus jugadores, desde lo físico y lo mental, para seguir soñando.

Las cuentas son claras para la tricolor: dos victorias frente a Polonia y Senegal le dan el cupo a los octavos de final sin importar otros resultados. Un empate contra los polacos ya lo haría depender de otros marcadores y la derrota sí lo eliminaría definitivamente de la sexta presencia mundialista de la historia.

Primero tendrá que sortear la ausencia de Carlos 'La Roca' Sánchez, el equilibrio del equipo, que sería reemplazado por Wílmar Barrios. El técnico echará mano de hombres de experiencia que le den un mejor manejo a las situaciones difíciles, por eso Cristian Zapata y Abel Aguilar serían de la partida frente a Polonia.

Yerri Mina y Mateus Uribe también tendrían un lugar entre los titulares y la gran incógnita es la de James Rodríguez. No sabe si estará habilitado para 90 minutos o, como contra Japón, solo jugará unos minutos. En ataque, Luis Fernando Muriel estaría por José Izquierdo.

La tricolor seguirá preparando el duelo contra Polonia en el Sky Resort de Kazán, porque el próximo domingo, cuando en Colombia se festejará el Día del Padre, los jugadores deben sacar la casta, deben mostrar la jerarquía de país que tiene objetivos grandes y como los escarabajos, imponer la condición de escaladores, de especialistas en superar las montañas más altas del mundo.