$350 millones vale la echada de Pacho Maturana

Osvaldo Hernández

LA PATRIA | Manizales

La de ayer no fue una calle de honor, como sucedió el 5 de junio pasado, cuando llegó. Los periodistas, las cámaras, los micrófonos y las grabadoras remplazaron a los hinchas, los cánticos y las pancartas de bienvenida.

Así abandonó ayer Francisco Maturana el estadio Palogrande. Incluso, murmuró y manoteó. Dijo que le parecía morbo el hecho de que lo siguieran con las cámaras a su salida del escenario. Los comunicadores le respondieron que era su trabajo.

Ayer, a las 8:00 a.m., Pacho Maturana dejó de ser el técnico del Once Caldas. William Gómez Eslava, gerente general del Club, bajó al camerino y les notificó la decisión. Se van Maturana, pero también, Ricardo Chicho Pérez (asistente), Johan Zapata (preparador físico) y Donaldo Cardona (metodólogo).

Mientras el técnico atendía a los medios en la última rueda de prensa, el Club emitió un comunicado con la determinación. El equipo entrenó ayer bajo la orientación técnica de Herney Duque y Juan Carlos Henao, quienes dirigirán el fin de semana ante Cortuluá.

"La Junta Directiva en pleno, con el visto bueno de los máximos accionistas de la Sociedad, ha decidido de manera unilateral dar por terminado el contrato suscrito con Francisco Maturana".

Lo echaron

La salida de Maturana estaba decantada por los malos resultados y los pocos argumentos futbolísticos, sin embargo, fue el pasado viernes que se "rebosó la copa".

Ese día hubo una reunión en Medellín y, Pacho, en vez de dar explicaciones por los los malos resultados, hizo algunas exigencias respecto a jugadores que necesitaba y problemas de logística que tenía en el Club.

La dirigencia, más que aceptar los reclamos, le hizo saber la situación económica y lo que se venía. Al técnico chocoano no le gustó lo que le dijeron y preguntó si era que lo querían sacar.

"Pacho dijo que lo echaran, pero que le tenían que pagar todo el contrato. La dirigencia le dijo que sí, pero que la idea era que finalizara bien y que dirigiera ante Cortuluá el sábado", dijo la fuente.

A Pacho no le gustó la posición de los dirigentes y les anunció que el martes - ayer- entregaba el equipo. No obstante, la dirigencia ordenó que una vez el técnico llegara al Palogrande le notificaran el despido y que se le entregara el equipo a Duque y Henao. Según el contrato firmado, la indemnización tiene un costo cercano a los $350 millones para los cuatro integrantes del cuerpo técnico. Les pagarán el 40% del total acordado.

Duque terminó el semestre pasado el ciclo de Hernán Lisi, también licenciado. Jugó seis partidos, ganó dos, empató dos y perdió dos.

"Payolas existen a todo nivel"

Maturana atendió a los medios de comunicación en el museo donde fue presentado el 5 de junio.

* No iba a renunciar, porque siempre que llega un entrenador empieza la cuenta regresiva para saber cuándo se va, cuándo lo echan o cuándo renuncia".

* "Quizá no agarré el caballo, en el camino encontré cosas que ameritan una ruta diferente".

* "Afuera nunca encontré cosas distintas al apoyo; todo fue respaldo".

* "He sido cesado, llámenlo como quieran; lo acepto".

* "Aprendí hasta vocabulario, por ejemplo, existen las payolas (pagar por hacer algo) a todo nivel".

* "No tengo compromisos con los jugadores, independiente de las payolas".

* "Sobre las payolas, una pregunta o un comentario tiene precio, pagado por un directivo o un representante".

* "El jugador no sobornable sabe cuándo se toma una decisión, no toma el teléfono y llamar a llorar porque no lo ponen".

* "Tengo la culpa en todo, estoy aquí para eso, no vengo con un manual de disculpas".

Sus rendimientos

- De local

- De visitante

- Total

Pinti, otro que se fue

Otro que le dijo adiós al Once Caldas fue el delantero paraguayo Ernesto Pinti Álvarez. El viernes pasado llegó a un acuerdo con el Club para regresar a su país, a pesar de tener contrato seis meses más.

Felipe Paniagua, director deportivo del Club, explicó que el deportista cobró salario hasta el pasado viernes y que colaboró con Sol de América, el equipo de donde venía, para que no cobrara el valor del préstamo de los derechos deportivos. Por eso se fue con el paz y salvo en la mano.