El futbolista del Once Caldas Juan Carlos Henao está a punto de sumar 600 partidos jugados con el equipo. Aun sin alcanzar esa cifra, ostenta la marca de ser el jugador con más participaciones, con hazañas inolvidables como el campeonato de la Copa Libertadores de América 2004, en la cual fue figura determinante, especialmente en el partido final.
A sus 43 años de edad podría ser también el futbolista más longevo que haya defendido los colores del onceno local. No sé si siga siéndolo el uruguayo Wálter Gómez, quien por allá en 1962 vino al Once con el antecedente de ser uno de los históricos de la ‘Maquinita’ del River Plate argentino de 1938. El hombre confesaba 42, que bien podrían ser 45 o más. Y por esa misma cifra podría estar el argentino Dante Lugo, de inolvidables partidos en 1966 y 67.
Ninguno de los dos permaneció en Manizales el tiempo que Henao, quien con breves intervalos en Bucaramanga, Santos del Brasil, Real Cartagena, el Maracaibo de Venezuela y Millonarios, ha jugado en el Once desde 1992. Por todo ello, y con sobra de méritos, es uno de los futbolistas más queridos por la veleidosa hinchada caldense. Sin dudas, el suyo es un caso raro en el fútbol mundial, pues lo normal es que los futbolistas permanezcan con los equipos un año, y si llegan a tres ya son excepción.
En Colombia lo usual es considerar el presente como una vitrina para mostrarse y desde su primera declaración a la prensa los jugadores advierten que su sueño es obtener contratos en el exterior. Pocos -por no decir ninguno- dicen venir a defender la institución que les paga millonadas al mes, las cuales millones no devengamos al año, ni a buscar campeonatos ni nada. Apenas entran quieren largarse. O sea, su espíritu jamás llega al equipo que los contrata.
Aun si se entiende que la vida útil de un futbolista es corta y que por lo mismo tienen derecho, y obligación, de buscar mejores opciones laborales, es inaceptable la deslealtad con que la mayoría trata a los equipos para los que juegan y, por ende, a la multitud de hinchas que se ilusionan con su presencia. La lealtad no hace parte del jugoso contrato.
Es como si se considerara que ésta solo se desarrolla con permanecer durante mucho tiempo en una sola institución. En realidad, debería surgir desde la firma del contrato, el cual no es otra cosa que el compromiso de hacer. Entonces, como la mayoría no se compromete con el equipo del cual viven bien y les permite tener reconocimiento colectivo, se podría concluir que pocos cumplen con su contrato.
Se ha llegado al punto de considerar implícitamente que la lealtad causa detrimento patrimonial, por suponer que ésta es quedarse por siempre. Entonces, cuando ya se han largado hacia otros lares, al anotar un gol a su antiguo equipo, no lo celebran dizque que por respeto, en un acto de fingida lealtad que se convierte en una burla al onceno de turno y sus seguidores.
Desde esa perspectiva lo de Juan Carlos Henao va mucho más allá de una marca de vigencia profesional y de permanencia de vida. Porque las veces que se fue de Manizales, y a pesar de haber enfrentado en varias oportunidades al Once, siempre dejó claro que su deseo era vestir la camiseta de este equipo. Y una vez regresado nunca protestó por no ser titular, ni se desanimó con las malas campañas.
Por el contrario, se convirtió en ejemplo de disciplina; es el enlace entre directivos, entrenadores y compañeros, consejero de jóvenes y encargado de levantar los ánimos en la derrota. Tal vez ha impedido que la nociva presencia de cierto futbolista caleño haga todo el daño que podría con sus actitudes cuasi sociopáticas. Por ello y por todo lo que ha hecho en las canchas es el más querido por la afición local. Además, es respetado por la ciudadanía, futbolera o no.
Pero el gran aporte de Henao, no solo al Once Caldas sino al fútbol, es su demostración de que la lealtad no es solo fundamental. Es el factor que hace la diferencia entre ganar en un campo, que muchos atletas logran, y triunfar en la vida, lo cual muy pocos alcanzan.
El uso de este sitio web implica la aceptación de los Términos y Condiciones y Políticas de privacidad de LA PATRIA S.A.
Todos los Derechos Reservados D.R.A. Prohibida su reproducción total o parcial, así como su traducción a cualquier idioma sin la autorización escrita de su titular. Reproduction in whole or in part, or translation without written permission is prohibited. All rights reserved 2015