En el fragor de periódicos que diariamente llegan a esta oficina, el suscrito alcanzó a ver un titular con declaraciones del gobernador de Risaralda, creo que lamentando el error de la división departamental.
El periódico, donde se cree contenía las apreciaciones del señor gobernador, se apartó para posteriormente leerlo y se había perdido para siempre.
Pero el tema por sí mismo es importante y merece comentarios serios. Primero, aceptar que como importancia nacional, la división de este bello territorio fue un gran error.
El peso específico ante las decisiones en el orden nacional, era grande entre los grandes del país. Hoy la región, dividida en tres pequeñas parcelas, es representada y tratada de acuerdo a su pequeñez.
Por eso las tres individuales y resignadas parcelas ven pasar raudo, año tras año, por cada uno de sus lados, comarcas que antes estaban mucho más atrás, desbancando los tres pedazos de tierras hoy divididas y débiles, ayer fuertes y ocupando la cabecera de los departamentos del país.
Las razones expuestas para la separación por parte de los entonces dirigentes de la ciudad de Pereira y poblaciones vecinas fueron varias y emocionales. El progreso de Pereira y su vecindad fue siempre vertiginoso, superando en un momento al de Manizales, que gozó desde su nacimiento de las importantes prebendas de ser la capital departamental. Si Manizales producía prohombres de nivel nacional, Pereira otros tantos. Naturalmente se despertó una rivalidad no siempre buena, pero nunca que diera lugar a la violencia.
Si se estudia a fondo como lo ha hecho el escritor Ernesto Gutiérrez se encuentra que los pobladores de Pereira, Armenia y Manizales, descienden de los mismos colonizadores antioqueños, parientes entre sí, que un día decidieron separarse, unos hacia las riberas de río Cauca cercanas a las costas del mar Pacífico y los otros optaron seguir hacia el Magdalena camino hacia el océano Atlántico. Los primeros, hicieron un pare y fundaron a la capital de Risaralda. Los otros en su camino épico, llegaron a un sitio ya escogido como fuerte militar y fundaron a Manizales en las cimas de las montañas de la cordillera central.
El Departamento de Caldas fue fundado en 1905 por el general Rafael Reyes, cobijando todas las ciudades mencionadas con sus cercanías colindantes. Fue siempre un departamento respetado con figuras públicas provenientes de las tres ciudades que participaron con fuerza en el desarrollo nacional.
Si bien hubo rivalidades propias de las características de sus habitantes, más de tipo político, pero no mucho más allá. Sus sociedades, tenían muy buenas relaciones correspondientes a la simpatía de todas sus gentes.
El suscrito tuvo un apoyo importantísimo del grupo de empresarios confeccionistas de Pereira, para ayudarme a reconstruir la fábrica de Tejidos Única de Manizales, recibida completamente quebrada, su maquinaria parada y una inmensa cantidad de telas de segunda clase rechazadas, que ocupaban hasta los últimos rincones de esta empresa. Estos señores confeccionistas se comprometieron a elaborar estas telas rechazadas para venderlas a los mejores precios posibles, produciendo para la compañía una liquidez que no tenía.
Fue también muy grato contribuir a la construcción del Aeropuerto de Pereira, haciendo aprobar en primer lugar un crédito solicitado en el IFI “Instituto de Fomento Industrial”, al llegar a su presidencia, por encima de los rechazos del ministro de Comercio de ese entonces.
Los habitantes de la ciudad de Manizales tenían frecuentes contactos con sus congéneres de Pereira, con los cuales se hacían continuos torneos de golf, que remataban en alegres fiestas en la ciudad que le tocaba ser la sede.
Hoy, a pesar de la división, se mantienen contactos incluyendo a amigos de Armenia a pesar de su lejanía.
Aprovecho para decir en estas letras mi afecto por Pereira, porque siempre he sido acogido con gran especialidad. Por eso debo recordar de que cuando se celebraron los encuentros entre los representantes de Pereira y los de Manizales, para tratar de dirimir lo de la división de los cuales este escritor hizo parte en las conversaciones llevadas a cabo en la finca de José Jaramillo Montoya, donde su propietario decía tener la fórmula para dar mate a este proceso. Y no estuve de acuerdo con la ironía casi hiriente con lo que algunos miembros de Manizales tuvieran, con ciudadanos pereiranos de la mayor altura y respeto como fue don Gonzalo Vallejo.
Ojalá el autor de este artículo haya acertado con lo que creyó ver, como titular en algún artículo que perdí, del señor gobernador de Risaralda en la maraña de periódicos que llega cada día.
Si estoy en lo cierto, el gobernador estaría por la integración, como está el mundo de hoy, por la integración. Los países europeos se integraron con gran éxito, a pesar de la diversidad de idiomas, religión y gobiernos. Ahora la CEPAL está invitando también con gran esmero, a la integración de los países latinoamericanos.
Existen muchos sistemas de integración donde no se hieren respetabilidades.
El uso de este sitio web implica la aceptación de los Términos y Condiciones y Políticas de privacidad de LA PATRIA S.A.
Todos los Derechos Reservados D.R.A. Prohibida su reproducción total o parcial, así como su traducción a cualquier idioma sin la autorización escrita de su titular. Reproduction in whole or in part, or translation without written permission is prohibited. All rights reserved 2015