Primer esperpento: La Iglesia Católica decidió prohibir desde esta semana que las cenizas de los difuntos sean esparcidas, divididas entre los familiares o guardadas en casa. "No se permite la dispersión de las cenizas en el aire, en la tierra o en el agua o en cualquier otra forma, o la conversión de las cenizas en recuerdos conmemorativos, en piezas de joyería o en otros artículos". "En el caso de que el difunto hubiera sido sometido a la cremación y la dispersión de sus cenizas en la naturaleza por razones contrarias a la fe cristiana, se le ha de negar el funeral". Para la Iglesia, "la conservación de las cenizas en un lugar sagrado ayuda a reducir el riesgo de apartar a los difuntos de la oración". “Según la Congregación para la Doctrina de la Fe (antiguo Santo Oficio), las cenizas deben mantenerse "por regla general en un lugar sagrado, es decir, en el cementerio o, si es el caso, en una iglesia o en un área especialmente dedicada a tal fin por la autoridad eclesiástica competente.” (El País 25-X-16). Extraña que el papa Francisco haya firmado un documento de esta naturaleza, cuando su principal virtud ha sido la de atraer a los creyentes del orbe por medio de su pensamiento liberal, moderno, progresista y consecuente ¿Será que la Iglesia tomará la decisión de ofrecer gratuitamente los espacios en sus lugares sagrados para que reposen allí las cenizas de millones de difuntos que no tienen con qué sufragar los gastos de una cripta o un lugar en una iglesia? ¡No lo creo!
A las personas se nos tiene que respetar la voluntad íntima, personal y autónoma de hacer con nuestro cuerpo lo que queramos. Si somos libres, por ejemplo, de donar órganos, ¿cómo no lo vamos a ser para determinar qué se hace con nuestro “último polvo”? Esto, con todo respeto, me suena más a negocio y ánimo de lucro. ¡Y así no son las cosas!
Segundo esperpento: hace unas semanas amanecimos en Manizales invadidos de unos escaparates verdes con tapa anaranjada que, por antiestéticos y aparatosos afearon las calles de una ciudad que ha hecho todo por lucir bonita, agradable y amable a la vista de propios y extraños. Los ubicaron en las principales avenidas de la ciudad ocupando espacios de tránsito e interfiriendo la libre circulación de los peatones que ya tienen que arriesgar su vida en cruces de gran congestión.
No dudo de las buenas intenciones de Emas, empresa que ha sido eficiente en su trabajo y nos ha hecho sentir orgullosos de la limpieza de la ciudad. Tampoco dudo de que la Administración Municipal quiera contribuir a mantener la ciudad impecable. Pero no es propiamente afeando, congestionando los espacios públicos ni poniendo en riesgo la vida de los peatones como se logran esos objetivos. Además se están generando algunos problemas adicionales: los recicladores ocupan la calzada de las avenidas para escarbar dentro de estos basureros y, además de arriesgar su vida, dejan los sitios aledaños ahora sí invadidos de basuras; y cuando los carros recolectores hacen su tránsito para desocupar estos “tanques”, forman grandes congestiones en una ciudad cuya escasez de vías representa una limitante que hemos aprendido a sobrellevar, pero que no podemos recargar por arreglar un problema que no existe. No puede ser que en una ciudad en la que nunca hemos tenido el problema con la invasión de basuras, estemos teniendo uno serio con la invasión de basureros.
Suena, al menos, paradójico. Y una ñapa: el acompañamiento artístico de algunas cebras de la ciudad que han sido pintadas con detalles de colores vistosos, le dan un aire de frescura y pueden hacer muy agradables el ambiente. Pero queda una inquietud: ¿es legal alterar las señales internacionales de tránsito? De ser legal, ¿le han hecho la suficiente difusión para que los peatones sepan que estas zonas son de su uso exclusivo y para su protección, y los conductores, a su vez, sepan que éstas operan como zonas peatonales? Estos detalles, que pueden ser agradables a la vista, no se pueden convertir en factores de riesgo para peatones y conductores.
El uso de este sitio web implica la aceptación de los Términos y Condiciones y Políticas de privacidad de LA PATRIA S.A.
Todos los Derechos Reservados D.R.A. Prohibida su reproducción total o parcial, así como su traducción a cualquier idioma sin la autorización escrita de su titular. Reproduction in whole or in part, or translation without written permission is prohibited. All rights reserved 2015