César Montoya Ocampo cmontoyao@hotmail.com
A veces el cerebro lanza fogatas que destellan. Solo una frase queda tatuada en bronce, o un párrafo entresacado de un largo
escrito, tienen resplandor cenital y siguen
gravitando en la memoria como
estrella que jamás se apaga.
Guillermo Sepúlveda, poeta quindiano, es autor de estos versos estatuarios:
"Y pensar ¡ay!
que el mar es un cadáver
de ríos que se ahogaron".
Guillermo Valencia:
"Eres una mentira con los ojos azules".
Pablo Neruda:
"Es tan corto el amor y es tan
largo el olvido".
Jorge Luis Borges:
Me duele una mujer en todo el cuerpo".
Emilio Ballagas:
"Soy un árbol, la punta de una aguja,
un alto gesto ecuestre en equilibrio:
La golondrina en la cruz, el aceitado
vuelo de un búho, el susto de un ardilla".
Julio Flores:
"Todo nos llega tarde, hasta la muerte".
Eduardo Carranza:
"Salvo mi corazón, todo está bien".
Sándor Márai:
"A veces me siento como un recuerdo
de mí mismo".
Don Miguel de Unamuno:
"No hay porvenir; nunca hay porvenir. Eso que llaman el porvenir es una de las más grandes mentiras. El verdadero porvenir es hoy". (Borges decía que Unamuno era jactancioso y majadero).
Gilberto Alzate Avendaño:
"Por la época de la colonia vino de España a estas tierras el oidor Don Juan de Alzate, un hombre rico, bohemio, enamorado, amigo de la buena mesa, sensual, lascivo y sátiro; se hizo dueño de una extensa propiedad rural cuyos linderos iban desde las riberas del Río Bogotá hasta los playones del Magdalena. Una tarde salió a recorrer sus inmensos dominios y en un recodo del camino halló solitaria a una preciosa joven indígena, mujer ligera de ropas, de senos turgentes, de mirada con fuerza de relámpago, de labios apetitosos, y aquel Juan de Alzate, que os había dicho era sátiro, bajó presuroso de su caballo, abalanzándose sobre ella, apercollóla, derrumbóla, poseyóla y…heme aquí".
Héctor Marroquín Jiménez:
Ejercía la abogacía como empírico. Un día tuvo de contraparte a un abogado arrogante quien socarronamente, para minimizarlo, expresó: "Me he sentado en los bancos de las mejores universidades del país". Marroquín, molesto con la repetición de esa misma frase, le contesta: "Dudo que se haya sentado en los mejores bancos universitarios. De lo que sí estoy seguro es que el Derecho no entra por el c….".-
Hugo Tovar Marroquín:
Participaba en una audiencia el abogado Tovar Marroquín enfrentado a un colega de apellido Ternera, sobre el significado de las expresiones jurídicas resolución y rescisión. Mientras Ternera sostenía que estas dos palabras eran sinónimas, Tovar decía lo contrario. Era largo el debate semántico. Tovar Marroquín le dice a su contradictor: "Permítame usted, doctor Becerra….", a lo que éste ripostó: "Yo no soy Becerra, soy Ternera". Y Tovar cerró de un tajo la discusión: "Pero Ternera y Becerra son sinónimos". La polémica terminó en una sonora carcajada del público.
García Lorca:
"y un horizonte de perros
ladra muy lejos del río".
Podríamos seguir, sin continencia, espigando versos y breves prosas iridiscentes que evidencian la potencia creadora de la mente.
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