Sor Lilia, el ángel de Estiven

Redacción Q'hubo

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Mariana tiene un ángel, su hijo de año y medio de edad, Ángel Estiven. El pequeño nació sin un pedacito de cerebro en el lado derecho, por eso no gatea ni camina ni se sostiene sentado, solo se arrastra. El niño presenta parálisis cerebral y hemiparecia derecha.

A medida que Ángel crece aumenta de peso, por eso el médico le recomienda a Mariana que debe permitir que el niño se arrastre, "pero es imposible", asegura la madre.

Al conocer el lugar donde viven, en el barrio Santa Ana, en las afueras de Villamaría, Mariana tiene razón. Si ella permitiera que el niño estuviera por el suelo de su casa, correría más riesgo. Las puntillas y la esterilla podrían herir el pequeño.

Esta situación la conoció sor Lilia Ramos, en Villamaría, y con aportes de la comunidad consiguió la cerámica y el material para organizar la habitación de la parte superior, adecuar una en el primer piso, la cocina y el baño, que en este momento, está en el mismo lugar donde Mariana prepara los alimentos.

Mariana, su esposo y el niño vivían en la vereda El Arroyo, de Villamaría, pero la dificultad para trasladar el niño a sus terapias motivó que se movilizaran para el área urbana. "También me queda lejos llevarlo desde aquí, me puedo gastar hasta 45 minutos y eso que sin descansar. Me voy por la trocha aunque es muy inestable y me puedo caer".

Sor Lilia, con su corazón lleno de bondad, termina la visita a la familia con una reflexión. "no se justifica que mientras los de arriba caminan sobre alfombras y de punta para que el tapete no se ensucie, tengamos a un niño que se arrastra y no hay nadie para compartir".

Terapias

Ángel Estiven recibe terapia física, de fonoaudiología. crecimiento y desarrollo, ortopedia y neurología.

Informes

Sor Lilia Ramos

8773327 - 8770310 - 3127330372