A Marta Lina la pusieron a estrenar casa en Neira (Caldas)

JORGE IVÁN CASTAÑO

LA PATRIA | NEIRA

A escasos metros del cementerio central, sobre el camino a la vereda Cantadelicia de Neira (Caldas), se encontraba una rústica casa habitada por Marta Lina Tabares, de 84 años, personaje del pueblo y quien a consecuencia de una enfermedad perdió su visión.

Su pobreza extrema la llevó a tener que entregar al Instituto Colombiano de Bienestar Familiar a sus dos hijas, de las cuales no sabe su paradero. Sin embargo, después de vivir unos 60 años en soledad encontró al amor de su vida: José Domingo Díaz, de 86 años.

Esta pareja compartía la pequeña vivienda, que tenía una parte de piso en cemento y otra en tierra, techo con tejas quebradas y plásticos que filtraban las goteras en noches lluviosas. El espacio les servía de dormitorio, de cocina, de cuarto de reblujos y hasta de patio para un gallo, una gallina y un perro que tienen como mascotas. La situación les cambió.

Regalo

El mes pasado, estos ancianos recibieron las llaves de un hogar transformado gratuitamente y en condiciones habitables, gracias a la labor del grupo Solidarios en Acción, de Neira, que invirtieron por lo menos $13 millones en la obra. Los Solidarios recaudaron los recursos en campañas realizadas con la comunidad, que muestran ya como un logro.

"Estamos muy contentos. Domingo me dice que está muy linda la casa", agradece Marta Lina con algunas lágrimas en sus ojos, aunque no le permitan ver la obra que les mejorará sus condiciones de vida.

Los trabajos

A la vivienda de Marta Lina le instalaron nuevas ventanas, cableado eléctrico, tuberías, pisos, accesorios para cocina y baño. Ampliaron la entrada, repararon el techo, pintaron paredes y fachada. Además, los pusieron a estrenar cortinas, estufa, cama y edredones.