Noticias de Manizales y Caldas,
Abril 19 2024
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MARTHA LUCÍA GÓMEZ
LA PATRIA | MANIZALES
La casa real de San Antonio de Padua en Manzanares, es decir la Basílica Menor, se viste hoy de fiesta para ser consagrada en esta categoría.
Este municipio del oriente de Caldas recibe a por lo menos 70 sacerdotes y a sus fieles católicos para una ceremonia que se iniciará a las 11:00 de la mañana.
El camino no fue fácil. En el 2013 varios manzanareños, integrantes de la Fundación Probasílica Menor le propusieron al párroco, Yonny Quintana Niño, que presentaran a la Conferencia Espicopal de Colombia la solicitud de elevación del templo a la categoría de Basílica Menor.
Pero él les dejó ver el lamentable estado de la estructura, y se tuvieron que concentrar en una campaña para recaudar fondos y hacer las obras, cuenta Fabio Ramírez Ramírez en su libro La casa de Dios es mi casa, él es miembro de la Fundación y licenciado en Educación.
Señala que el 4 de abril del 2014 visitaron al obispo de la Diócesis de La Dorada-Guaduas, monseñor Óscar Aníbal Gómez, para entregarle el documento que enviarían a la Conferencia Episcopal y que el templo fuera elevado a Basílica Menor.
El 10 de julio del 2015 recibieron la noticia de que la Conferencia había dado su voto unánime para que el Vaticano aprobara esta solicitud. El 24 de diciembre del 2015 les dieron el mejor regalo. El obispo Gómez les comunicó que ya tenía el Decreto del Vaticano y el comunicado oficial de la Nunciatura Apostólica reconociendo el templo de Manzanares como Basílica Menor.
Símbolos
Según Ramírez, cuando un papa eleva una iglesia a la condición de Basílica Menor le otorga el derecho a lucir en el altar mayor dos signos de la dignidad papal y la unión con la Santa Sede: el umbrellín y el tintinábulo.
El primero son los escudos, desde el Vaticano hasta el de la Basílica, y el segundo es un mueble especial con una campanilla adentro.
El escudo de la Basílica consta de fajas de igual tamaño amarillo y rojo, con una cruz de oro en la parte superior puesta sobre una bola de metal. Tiene dos llaves entrelazadas, una de oro y otra de plata. Tres estrellas en la parte superior que representan las tres personas de la Santísima Trinidad sobre un fondo morado. La imagen del cerro de Guadalupe, máxima riqueza natural de Manzanares, y una cinta de oro con el nombre de la Sacrosanta Basílica Menor San Antonio de Padua, y Manzanares. Hoy se abrirán y se cerrarán de nuevo, y no volverán a hacerlo mientras no venga el papa Francisco al país, asegura Ramírez.
La ceremonia
"En el municipio hay mucho entusiasmo y mucho fervor por la ceremonia", dice Ramírez. Explica que la ceremonia de consagración tiene varias partes.
"Antes de iniciar la ceremonia, en el atrio, hablaré de la parte histórica de la Basílica, luego la iglesia debe estar totalmente sola, y monseñor Óscar Aníbal, con las dos manos, abrirá la puerta principal para entrar acompañado de los obispos invitados, el párroco y los sacerdotes, luego los miembros de la Fundación Probasílica y detrás toda la gente".
A continuación el obispo descubrirá la placa conmemorativa en la que quedó consignado el nuevo título de la iglesia y se iniciarán las ceremonias.
"El obispo le preguntará al párroco: ¿Usted tiene el decreto emanado del Vaticano?, y él le responderá que sí. Lo lee y luego debe ir a cada una de las columnas del templo, donde aparece una cruz con un velón, y las consagra. Abren y bendicen el Tintinábulo y el Umbrellín para iniciar la misa.
Ramírez sostiene que como Manzanares ha pertenecido a las diócesis de Ibagué, Manizales y La Dorada, estarán representantes de las tres. De La Dorada llegará monseñor Óscar Aníbal Gómez con los miembros del Seminario; de Manizales monseñor Luis Enrique Hoyos, rector del Seminario Mayor con el coro del Seminario, y de Ibagué el obispo Flavio Calle. Fuera de eso estarán sacerdotes manzanareños y los que han prestado servicio en el municipio.
El atrio estará cubierto hoy con una carpa y dotado con sillas plásticas y equipo de amplificación para que quienes no quepan dentro de la Basílica queden cómodos afuera.
Desde su fundación, Manzanares se ha caracterizado por su religiosidad. Cuando la población ascendía a 400 habitantes decidieron solicitar que su iglesia, un rancho rústico de paja, fuera elevada a la categoría de parroquia. Las diligencias La primera misa fue en 1866, año en que fue erigida parroquia. En 1902, el sacerdote alemán Antonio María Hartman inició la construcción de un segundo templo en tapia, con una puerta central y dos laterales, techo cubierto con tejas de barro, campanario, altar mayor y las imágenes de San Antonio de Padua y San Francisco de Asís.
La comunidad de sacerdotes Agustinos Recoletos llegó a Manzanares el 1 de diciembre de 1916 para continuar con la obra con guadua, madera, bahareque, tapias y zinc. El 18 de noviembre de 1945 un voraz incendio destruyó este templo, quedando en pie solo las columnas de piedra y el frontis.
Con el trabajo de un nuevo párroco, Pedró José Ramírez Sendoya y la ayuda del maestro de obra Pablo Díaz, continuaron con las obras en ferroconcreto y ladrillo. Luego fue nombrado párroco Marcos Lombo Bonilla, pieza central de la obra, y la finalizó el padre Julio Giraldo Serna, en 1967, quien suprimió la construcción de la torre central.
* Tomado del libro La casa de Dios es mi casa.
Estilo arquitectónico Romántico y Republicano.
Altura 42 metros.
Profundidad 59 metros.
Ancho 32,50 metros.
Capacidad 792 personas sentadas y 580 de pie.
Tiene sacristía, oratorio.
En la cima de la cúpula tiene una imagen de Cristo Rey de 2 metros de alto.
Tiene un pararrayos de 1 metro.
El templo tiene en una torre un par de campanas y un reloj de gran tamaño cuya cara da al parque.
Tiene unos 40 artísticos vitrales adquiridos por el padre Marcos Lombo en Cali y fabricados por la firma Velasco, e instalados por el padre Julio Giraldo Serna.
Tiene un altar elaborado en fina madera, torneado artísticamente.
Cuenta con tres amplias y largas naves.
El altar mayor se encuentra en la nave central donde está construida una gigantesca cúpula decorada, y en la parte alta están las imágenes de los cuatro evangelistas.
El altar mayor está dedicado a San Antonio de Padua, su patrono, y al otro lado se encuentra San Francisco de Asís, bajo cuya protección está consagrada la parroquia.
Con esta consagración de hoy, es la sexta iglesia en el Eje Cafetero que recibe este reconocimiento. Las otras son:
Inmaculada Concepción, de Manizales
Inmaculada Concepción, de Salamina
Las Mercedes, de Chinchiná
Las Victorias, de Santa Rosa de Cabal (Risaralda)
Catedral Basílica de Manizales
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