Exploración en Berlín y San Diego (Samaná) Uranio en Caldas, todo por descubrir

EQUIPO LA PATRIA | Manizales

En Samaná, en el oriente de Caldas, hay uranio. Eso está claro desde hace por lo menos tres décadas. La expectativa en estos años se ha centrado en determinar qué cantidad de este mineral radioactivo guardan las entrañas de la tierra en los corregimientos Berlín y San Diego.

En otras palabras, las empresas que han llegado se han empeñado en saber si vale la pena invertir millones y millones de dólares en procesos como los de exploración y posible explotación. Las potencias apetecen el uranio por ser un generador de energía que reemplaza hidroeléctricas, termoeléctricas y toda generación de energía con hidrocarburos.

Las inquietudes, sobre todo de líderes en Samaná, tienen que ver con el posible daño ambiental en esta zona caldense, quizá la más rica en fuentes de agua y variedad de flora y fauna. Aún más, hay temor sobre los efectos que en las personas, entre ellas quienes sean contratadas como trabajadoras, podría causar la extracción de un metal que es usado como fuente abundante de energía concentrada.

Por ejemplo, en la zona está la Laguna de San Diego, maravilloso espejo símbolo de la región. También hay árboles en vía de extinción como el comino.

Títulos

En la actualidad la compañía Gaia Energy tiene cinco títulos mineros sobre 10 mil 700 hectáreas y completa casi tres años y medio perforando la montaña, cada 100 metros, para averiguar el contenido real de mineral. Esta empresa es subsidiaria de U3O8 Corp, compañía con sede en Toronto (Canadá) que centró su expansión en la exploración de recursos de uranio y productos asociados en América del Sur.

Hasta ahora Gaia ha explorado el 30 por ciento del territorio, lo que le marcó 20 millones de libras. La empresa calcula que para conseguir una inversión rentable requiere encontrar 100 millones de libras.

Es decir, volvemos al principio: uranio sí hay, pero tomar la decisión de pasar a la explotación depende de la cantidad que se encuentre. Eso podría tardar unos 12 años o más.

También hay que tener en cuenta el precio del uranio, que con las crisis energética y ambiental, del 2003 y 2004, subió a 130 dólares la libra, lo que hacía rentable su negocio. Luego se estabilizó en 70 dólares. Sin embargo, después del accidente del reactor de Fukushima (Japón) con el terremoto y el tsunami del 11 de marzo del 2011, bajó a 50 y 45 dólares, lo que desestimuló la inversión.

Sin embargo, empresas como Gaia ven en el boom de energías verdes la oportunidad de negocio generando energía con base en uranio y con más posibilidades de éxito que por sistemas solares y eólicos, limitados a condiciones climáticas.

En Berlín y en San Diego, dos corregimientos azotados por la violencia en la década pasada, han visto en Gaia la posibilidad de regreso de quienes salieron desplazados. Por eso, destacan el empleo recibido hasta ahora.

Por el oriente

El hallazgo de uranio en Samaná fue producto de una coincidencia. En 1978 un grupo de geólogos franceses viajaba en carro entre La Dorada (Caldas) y Sonsón (Antioquia). Ellos iban hacia territorio antioqueño, pues tenían noticias de presencia del mineral en el suroriente de ese departamento.

Los extranjeros iban en un vehículo. De pronto, a su paso por la vereda San Juan Alto de Samaná, sus sensores empezaron a pitar. Se bajaron y detectaron la roca mineralizada en una franja de 3 a 4 metros sobre la vía. Hasta ahora se ha comprobado que son cerca de 11 kilómetros lineales en los que está el mineral. Ese año una empresa francesa perforó siete pozos, motivada porque el precio del uranio hacía rentable la inversión. La esperanza se vino al traste, pues coincidió con gran producción mundial de petróleo, lo que hizo más barato explotar oro negro que uranio.

Gaia completa tres años midiendo y midiendo la cantidad de uranio. De los resultados depende que sigan en la zona. En caso de que se pase a la extracción es posible que aumenten el empleo, el aporte social, las posibilidades de regalías para Samaná, pero seguro continuarán los temores sobre todo relacionados con impactos ambientales.

Voces con inquietudes

En Berlín

Luz Elena Rendón, líder comunitaria

En 1980 Minatome y Geominas, empresas francesas, empezaron a explorar uranio, prometieron arreglar escuelas y vías. Duraron tres años sacando muestras, luego se fueron y no volvieron. Ahora llega Gaia, lleva tres años y ha hecho algunas obras sociales, en el pueblo no se ha visto algo que realmente valga la pena. Se fueron para San Diego y muchos aquí quedaron sin empleo. Una gran preocupación es por contaminación con radiación. Donde hacen las exploraciones la tierra queda muerta y con huecos. No he ido a socializaciones porque estoy cansada de las mentiras de Isagén. Ahora, no quiero saber lo que dice esta empresa. Madres comunitarias solicitaron ayuda para juguetes de niños de la guardería por $800 mil y se la negaron, una empresa tan rica, es increíble. No estoy de acuerdo con lo del uranio, pasará el tiempo y veremos los peligros que causan cáncer y muerte y daños ecológicos.

En San Diego

José de Jesús Cardona, director veeduría por la Transparencia

Del uranio se sabe que es radioactivo a pesar de las socializaciones que ha hecho Gaia. Nos quieren mostrar que no es peligroso, pero la realidad se verá con la explotación. Tendremos fuentes de agua contaminadas, en el entorno de las minas es un peligro por emanación de gases y radiación para personas y animales que podrían tener malformaciones. Pasamos por la violencia y no queremos el fenómeno de mutilaciones por la radiación. Al gobierno solo le interesan transferencias y plata. En Estados Unidos prohibieron por 20 años la explotación de uranio, por contaminación y problemas de salud que estaba causando. ¿entonces realmente cuál es la dimensión del problema?

De las autoridades

Wílder Escobar Ortiz, alcalde de Samaná

En Samaná aún no se explota uranio, están en exploración. Gaia se contactó con el municipio y la Gobernación de Caldas, en una reunión técnica se tocaron temas e inquietudes que genera tener un proyecto de este tipo en la región. Entendemos que no hay título de explotación, pues estarán en el territorio y eso es prorrogable 10 o 15 años, para ver si es viable y por ende rentable. Lo del uranio es nuevo en Colombia, Caldas y Samaná, por lo que crea inquietudes, por eso estamos al frente del tema. Hemos hecho jornadas con la Alcaldía, incluida la Personería, y se resuelven inquietudes. La empresa visitó el Concejo y socializó lo que está haciendo.

Conrado Rojas, corregidor de Berlín

Han sido cosas muy positivas que ha traído Gaia a Berlín. Invierten en lo social, en la escuela, el parque está muy bonito, hay viveros para especies nativas. Generan empleo en la región. Sobre el temor por el uranio, en socializaciones y capacitaciones nos enseñan que no es tan peligroso.

Jesús Emilio Díaz, corregidor de San Diego

Luego de desplazamientos, amenazas, muertes y desapariciones por grupos al margen de la ley, volvimos a la paz. El uranio es alternativa para la economía de la región y a pesar del temor por la radiación, con los acercamientos con la empresa, la gente cree en esta posibilidad. Están en exploración y responden inquietudes. Si llegan a la explotación, lo haría otra empresa y veríamos cómo se responderá a temores sobre posibles riesgos y perjuicios.

Alfredo Roncancio, secretario de Gobierno de Caldas

Para Caldas son muy importantes este tipo de proyectos, esto significa inversiones grandes. Hasta ahora ellos han invertido muchos dólares solo en la exploración. Si se da la explotación sería mucha más plata y desarrollo para la región. Precisamente esta semana se le renovó a la empresa Gai el plazo para exploración, pues la prolongación está acorde con la ley. Ellos están cumpliendo con los requerimientos ambientales y técnicos.

Comunidad satisfecha

Dicen en San Diego

Horacio Marín, habitante

Es una bendición la llegada de esta empresa. Trabajaba esporádicamente, ahora soy arriero, pues usan mulas para llevar

equipos y material, hay buen sueldo, prestaciones sociales, capacitaciones. Me enseñan a administrar lo que gano y valorar la familia. Las mulas son de un amigo, todos ganamos.

Ferney Herrera, docente pensionado

Nos afectó la violencia, en el pueblo quedaron pocas familias. Gracias al regreso de la paz, la gente volvió y Gaia hace que mejoren expectativas. Había incertidumbre por el peligro de radiación de uranio. Gaia ha enseñado que tiene más radiación un celular o una radiografía.

En Berlín

Luis Fernando Flórez, habitante de Berlín

Fui raspachín de coca por falta de oportunidades, pero por desengaño y violencia me retiré, gracias al plan de Guardabosques. Gaia nos brinda trabajo, fundamental para el progreso. Nos enseñan a valorar la familia, a administrar el dinero. No conocía lo del uranio, hoy nos han capacitado sobre el tema. Ha mejorado la calidad de vida.

Lo que dice la empresa

Andrés Cáceres, gerente de Gaia Energy

Desarrollo sostenible

“Las empresas de exploración no tienen obligación de hacer trabajo social, pero Gaia tiene el propósito de contribuir al desarrollo sostenible de la sociedad, además es de tipo ambiental y social, por eso busca generar un nuevo modelo de exploración. Tenemos claro que el éxito empieza con labor social y ambiental, si no hacemos eso con la comunidad, Corpocaldas, Delegación Minera, dirigentes, no lo logramos”.

Los predios

“Tenemos precios que acordamos con parámetros, por ejemplo sobre ingresos de la comunidad, metros de predio utilizado. Sacamos números, duplicamos la cifra y eso es lo que pagamos. Cualquier zona por intervenir al propietario se le paga arriendo, servidumbre por ese derecho. Eso varía, según la intervención, si es en pasto, potrero, trinchera, plataforma, o sistema de cable. Tenemos una tarifa para la zona. Se firman contratos con los valores claros. Hay gente que se ha negado, que el precio no le sirve, por ejemplo. En estos casos tenemos un abogado para sentarse con comunidad y propietario dejando claro valores basados en el catastro, IGAC. Hemos logrado conciliaciones con todos”.

La afectación

“El uranio natural no afecta al minero. Trabajamos todos los días con uranio metidos en trinchera midiendo, tomando muestras; tenemos parámetros de seguridad, se hacen controles para medir cuál es la exposición y se envían resultados, están al orden 100 mil veces menos de lo que lo afectaría. En la extracción no hay riesgos, pues aquí no hay plantas, hay es materia prima que sale del país. Aquí se saca roca, se muele, se hace una separación preliminar. En Colombia no hay reactores nucleares, pues tiene mucha agua y la producción es con hidroeléctricas”.

AMBIENTAL

Sandra Mahecha, administradora ambiental

“La Laguna de San Diego no se intervendrá así hubiese uranio, que no hay. Tenemos obligación de hacer zona de restricción en cuencas y las que alimentan la Laguna son distintas. En proceso de exploración, la empresa no es obligada a una licencia, pero sí a permisos para usar recursos e intervenir áreas, consecución de aguas y títulos mineros.

Hemos desarrollado programas de educación ambiental, vivero, compensación, manejo de aguas residuales, flora y fauna. Brindamos educación a nuestros auxiliares de campo, programas educativos de conservación de especies. Talleres en escuelas como la de Alto San Juan, proyecto escolar ambiental, grupo ecológico en colegio. Reforestación en sitios que ameritan. El vivero que hicimos es eje de programas ambientales”.

Sitios de perforación

“La compañía tiene permiso sobre un área de 250 metros cuadrados para cada sitio de perforación. Solo intervenimos 150 metros, se hace un inventario de flora antes de que entre la perforadora. Los predios son de particulares, se consiguen permisos y se paga la servidumbre. Hasta julio pasado se habían instalado 34 plataformas para explorar en igual número de predios. 5 en el 2010; 21 en el 2011, y 8 en el 2012 para un total de 10 mil 211 metros, lo que significa 15 % del área autorizada. En áreas recuperadas el 31 % es bosque, rastrojo alto y bajo, el 24 % potreros”.

Recuperación

“Consiste en el desmantelamiento, se saca el taladro, se hace una entrega oficial de la empresa de plataforma y se limpia de residuos peligrosos. Llegamos con esa acta para recuperar con aislamiento, y se efectúa el restablecimiento del terreno con cobertura vegetal. Se implementó un sistema de cable aéreo, que ha evitado que se golpee la vegetación y se evitó un camino por la quebrada Santa Marta, una inversión que minimiza los impactos sobre la zona. La empresa ha comprado predios para asegurar cuencas abastecedoras de acueducto”.

SOCIAL

Ana Carolina Álvarez, coordinadora de gestión social

¿Por qué ha faltado y tardado la socialización?

“Todo ha sido un proceso, hemos ido avanzando y ampliando la información. No queremos crear sin saber si efectivamente habrá una explotación. De mil proyectos en el mundo, solo uno se vuelve mina. No favorece que haya tanta especulación”.

Participación en desarrollo

“El acercamiento ha sido fundamental en el proceso que llevamos. El plan de gestión social se encamina a que la comunidad se organice y participe en su propio desarrollo. De conocer la realidad hemos implementado programas como visitas familiares a veredas. Se hacen reuniones con comunidad, estudiantes, se habla de minería y del proyecto. Se implementó la huerta comunitaria con 15 mujeres del Alto San Juan. La idea es que en sus fincas tengan huertas, sepan cómo trabajarlas y producir”.

Mejoras

“Mejoras al parque infantil, donación de uniformes, apoyo para participación en juegos regionales, sillas para adultos, iluminación en escuelas de Berlín y San Juan, 30 adultos mayores incluidos en actividades físicas, talleres de manualidades. En San Juan se mejoró el tanque del acueducto, que estaba descuidado y destapado”.

En educación

“Se notó bajo nivel de escolaridad y se indagó sobre quiénes querían estudiar. Se gestionó en la Secretaría de Educación y se inició un programa con 75 personas, 45 en Berlín y 30 en San Juan. Se gestionó un curso preicfes para alumnos de Berlín y San Diego. Estamos gestionando ante el Sena capacitación y formación. Se contrataron agrónomas que con un diagnóstico sobre productos de la zona asesoran para fortalecer el agro”.

El empleo

“En el 2009 se contrataron 11 personas; en el 2010: 51; en el 2011: 134, y en el 2012: 152. Trabajan como auxiliares de campo, exploración, caminos, labores ambientales, vigilancia, entre otros”.

Visión de expertos externos

Desde lo ambiental

Octavio Sánchez Cataño, geólogo y consultor minero-ambiental

Dice que el uranio es radioactivo y se encuentra en la corteza terrestre en cantidades que no se perciben en la naturaleza, pero cuando se transforman en yacimientos se halla en altas concentraciones. Advierte que al llegar a la fase de extracción, la empresa debe mantener estándares de seguridad industrial, pues como mineral radiactivo tiene un efecto directo sobre quienes estén en contacto con él. Un efecto al que se debe tener cuidado, explica, es al gas radón que está asociado con el mineral y es letal. Agrega: “por eso, en la explotación minera se debe tener un protocolo de seguridad. De no cumplirse, las consecuencias son quemaduras, esterilidad, impotencia, entre otros factores”.

Desde lo económico

César Caballero Reinoso, exdirector del DANE y director de Cifras y Conceptos

Afirma: "Colombia pasó de tener minería a ser un país minero. Está en ese tránsito, formalizando la actividad, con la presencia de grandes compañías. Antes se tenía una canasta solo con carbón, níquel, acero y oro, ahora se ha diversificado con otros minerales y metales". Sobre efectos de la gran minería en zonas agrícolas, como Samaná (Caldas), Caballero los cataloga como "la enfermedad holandesa, donde los campesinos cambian su actividad económica tradicional, porque creen que la minería es más rentable".

Considera que Colombia no está lista para explotación a gran escala que plantea la Locomotora Minera del Gobierno Santos, por la debilidad de las instituciones. “No todos los beneficios pueden ser para las empresas, el Estado tiene que pensar en la población, no sólo son las regalías, sino en presentar proyectos de encadenamiento con las comunidades".

En el caso de Caldas, Caballero dice que Ingeominas y las instituciones correspondientes son las que deciden si la región es adecuada para la explotación de uranio, pero que no se trata de "impedir la explotación si no fomentarla de manera regulada", ya que para él "entre más diversificada sea la economía caldense, mejor".