En Salamina, paran obras en la casa donde vivió la Madre Berenice

Luis Fernando Rodríguez

LA PATRIA | Salamina

La casa natal de la Madre Berenice, en Salamina, está en proceso de restauración. Su propietario Benjamín Gómez quería hacer de inmueble un atractivo turístico, en vista de que posiblemente el municipio caldense tendrá la segunda santa colombiana, si se surten los pasos de beatificación de la fundadora de las Hermanitas de la Anunciación.

Sin embargo, a la familia Gómez le tocará dejar el predio tal y como está, por ahora, porque el Ministerio de Cultura le impidió intervenir la estructura por ser un Bien de Interés Cultural que no autorización para ser intervenido.

El 6 de diciembre del 2017, en un documento enviado a Benjamín Gómez, la Dirección de Patrimonio del Ministerio de Cultura le solicitó suspender las obras y presentar el correspondiente proyecto de intervención para su estudio y eventual autorización.

La licencia solo la da el Ministerio

La casa, ubicada el Centro Histórico, está clasificada en el nivel 2 de intervención, es decir, que es de conservación tipo arquitectónico, en la que la organización espacial y elementos ornamentales deben ser conservados. Según Mincultura, la intervención de un Bien de Interés Cultural de ámbito nacional deberá contar con su autorización y no podrá sustituirse con ninguna otra clase de autorización o licencia expedida por otras autoridades públicas en materia urbanística.

En el mismo documento, firmado por Alberto Escovar Wilson-White, director de Patrimonio de Mincultura, se manifiesta la disposición de la entidad para brindar asesoría técnica con el fin de contribuir al proyecto en su correcta formulación, ejecución y seguimiento.

"Nosotros no estamos en contra de que un Bien de Interés Cultural se intervenga. Al contrario, siempre lo celebramos, solo que debe hacerse el trámite correspondiente", dijo Escovar.

Les habían dado permiso

En noviembre del 2017, el entonces secretario de Planeación, Carlos Adrián Ocampo Gallego, concedió a la solicitante Graciela Álzate de Gómez, esposa de Benjamín Gómez, el permiso para realizar el cerramiento y refuerzo de cimentación al interior de la propiedad.

Según los propietarios del inmueble, este requiere un reforzamiento estructural en la parte posterior por vencimiento de la vida útil de sus componentes y por el funcionamiento que tiene allí un local comercial, situado en la primera planta.

En una carta dirigida a la ministra de Cultura, Carmen Vásquez Camacho, el 30 de octubre del 2018, el arquitecto Benjamín Patiño Toro, especialista en restauración y conservación del patrimonio cultural arquitectónico, encargado del proyecto, manifestó que deberían suavizar las exigencias que hay que cumplir y que no están al alcance de la mayoría de propietarios que desean mejorar las condiciones de sus inmuebles.

El secretario de Planeación, Álvaro Iván Romero Cotacio, confirmó que la casa de los Gómez tiene una parte muy afectada que merece cambios importantes. "Pero estas intervenciones deben cumplir con todo lo que requiere la norma, por eso hay que mirar con juicio todas las variables del proyecto para que pueda llevarse a cabo".

Trámites eternos

Diana María Gómez Álzate, hija de los propietarios, precisó: “El primer proyecto fue devuelto por el Ministerio. Se envió el segundo, que cumplía con todos los requerimientos hechos en el primero, al que la Dirección de Patrimonio del Ministerio de Cultura le solicita realizar ajustes y subsanes".

Según los Gómez, los dueños de los inmuebles en Salamina prefieren dejarlos caer, antes de enviar proyectos tan costosos y difíciles de cumplir por tantas exigencias.

El arquitecto dice que a los Gómez le pidieron una información complementaria y exagerada. "Les exigieron un estudio de patología de la madera y según él, en Caldas no hay nadie con esta especialidad. Los patólogos de madera son escasos en Colombia y muy costosos. En el Ministerio de Cultura los trámites son eternos, por eso, ante tanta exigencia, los propietarios ya no quieren restaurar sus viviendas".

Paso a paso

-El proyecto se radicó en la Dirección de Patrimonio Cultural por primera vez en noviembre del 2017.

-Se devolvió con observaciones el 6 de diciembre del 2017. En ese momento el Ministerio de Cultura se entera de que ya habían empezado la obra sin autorización. Se solicita suspender los trabajos.

-Se radica el proyecto el 9 de febrero del 2018, pero aún no cumplía con la norma estipulada y se devolvió el 3 de abril de 2018.

-Nuevamente lo radicaron el 26 de noviembre del 2018 y se devolvió el 17 de diciembre del 2018 porque la estructura propuesta afectaba los muros originales.

-El 21 de enero del 2019 se recibió de nuevo y se va a priorizar su proceso de evaluación.

Alberto Escovar, director de Patrimonio del Ministerio de Cultura, indicó que Planeación de Salamina le dio autorización, pero el proyecto también requiere permiso de la Dirección de Patrimonio, por esta razón se enviaron comunicaciones solicitando suspender la obra a la Administración mientras lo aprueban. "Tenemos toda la voluntad de acompañar el proceso".