MARTHA LUCÍA GÓMEZ
LA PATRIA | MANIZALES
Las elecciones a Congreso de la República serán el 11 de marzo del 2018, es lo único fijo que tienen los diputados de Caldas que están interesados o han sonado para la Cámara de Representantes.
Hasta el momento no hay decisiones jurídicas que los respalden si deciden renunciar a su curul en la Asamblea Departamental e iniciar campaña a la Cámara, apartándose de una posible inhabilidad.
Ni los conceptos del Consejo Nacional Electoral (CNE) y de la Comisión Nacional del Servicio Civil (CNSC) los libra de la inseguridad. Les indican que al no ser ordenadores del gasto, o sea no tener recursos a su cargo; ni haber sido elegidos para una posición uninominal (gobernadores o alcaldes) podrían acceder a sus aspiraciones políticas.
Sin embargo, los diputados saben que los conceptos no obligan, no tienen efecto vinculante, y por lo tanto podrían ser sujetos de demandas, como le ocurrió al gobernador de Caldas suspendido temporalmente, Guido Echeverri.
El asunto es que la inscripción es en febrero del próximo año, que quien quiera llegar debe sacar al menos 25 mil votos y que un año para este último objetivo es muy poco, por lo tanto ya se están viendo cogidos de la tarde.
LA PATRIA consultó con los diputados que están en el sonajero para Cámara.
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