64 familias de Marquetalia seguirán en zona de riesgo

Liset Espinoza
LA PATRIA | Manizales

José Quintero Ospina vive en el barrio Nuevo Oriente, ubicado en zona de riesgo de deslizamiento en Marquetalia. Ayer el señor viajó 124 kilómetros junto con otras 20 personas para llegar a Manizales y asistir a la sala 311 del Palacio de Justicia Fanny González. Allí, llegaron a una audiencia de conciliación con la esperanza de lograr que varias entidades se responsabilicen de la situación que viven.
La posibilidad se esfumó, luego de que el juez declaró la audiencia de conciliación fallida por haber un acuerdo entre las partes.

El 15 y 16 de marzo del 2013 hubo un deslizamiento en el municipio que afectó a 64 familias, incluida la de José. El desprendimiento incluyó terrenos de los barrios Los Andes, Las Colinas, Milenio y Nuevo Oriente, localizados en una ladera.  El señor perdió la casa.

Debido a la magnitud de los daños el Consejo municipal de prevención de desastres ordenó evacuar la zona. Sin embargo, los damnificados al ver que las entidades no resolvían el problema volvieron al lugar, pero demandaron al Municipio, Empocaldas y Corpocaldas por reparación de servicios causados a un grupo.

La lucha
Carlos Alberto Arias Aristizábal, abogado de los afectados, indicó que las casas tienen fisuras y agrietamientos de gran magnitud que las hacen inhabitables.

"Lo que sucedió fue que la red de acueducto y alcantarillado que tiene extendida Empocaldas estaba deteriorada y obsoleta y pese a los  requerimientos y reclamos de la comunidad para su reposición, no lo hicieron", dijo.

Agregó que se generaron filtraciones de aguas residuales y que las  constantes lluvias de esa época fueron el detonante para que se presentara el movimiento de masa.

"En este momento sus vidas corren peligro y las entidades con el pretexto de que no hay presupuesto no arreglan el problema. Lo que buscamos en esta audiencia de conciliación es llegar a un acuerdo porque de nuestra parte nos interesan las soluciones efectivas", dijo.

Aclaró que hasta ahora Empocaldas sustituyó un 25% de la red de alcantarillado y el 75% restante está sin cambiar y el Municipio facilitó los dos meses arrendamientos por $150 mil mensuales.

Sin acuerdo
Durante la audiencia el juez le dio la palabra a los representantes de las entidades demandadas para que dieran a conocer si tenían alguna propuesta de conciliación.

La primera en hablar fue la representante de Corpocaldas, Beatriz Orrego Gómez, quien indicó que el comité de conciliación y defensa de la entidad decidió por unanimidad no presentar ninguna fórmula de conciliación al considerar el hecho como un evento imprevisible de la naturaleza.

"Para Corpocaldas no hubo conocimiento de ningún evento que pudiera prever la ocurrencia del hecho como un derecho de petición. Otro argumento de defensa es la omisión del Municipio por las fallas que hay en vías del sector y de Empocaldas porque existieron daños en las redes de alcantarillado.

Orrego Gómez también considera que se presentan como demandantes personas que no viven en esos barrios y que no pertenecen al grupo afectado.

Óscar Buitrago, abogado de Empocaldas, expresó que el comité de la entidad, al igual que las entidades anteriores, decidió no presentar una propuesta de conciliación.

Señaló: "Al analizar los informes del área técnica no se evidencia ninguna responsabilidad de Empocaldas en los supuestos perjuicios causados por el movimiento de tierra. Según los informes, no se debieron al mal estado del acueducto, pues al agua se le realizó una prueba de cloro y salió negativa. Coincidió con las otras entidades en el sentido que el evento fue causado por la naturaleza como consecuencia de las intensas lluvias", concluyó.

Tampoco el Municipio
Sobre el caso de las familias afectadas por el deslizamiento de marzo del 2013 en Marquetalia, el Municipio no quiso llegar a un acuerdo con los afectados. Martha Janet Álvarez, representante de la Alcaldía, explicó que el Municipio actuó conforme a las leyes ordenando la urgencia manifiesta para la atención inmediata y reiteró que lo ocurrido es un hecho ajeno a la voluntad de los administradores de la localidad.