Imaginando al Mandatario / Juan Felipe Marín y Héctor Fabio Rivera, San Agustín

La siguiente ponencia participó en la 1er. versión del Foro Juvenil: Imaginando al mandatario ideal, organizado por el Programa Prensa Escuela y apoyado por la Corporación Cívica de Caldas. Este se efectuó el 1 de septiembre del 2015.

La mayoría de personas soñamos con que nuestros gobernantes y mandatarios sean los ideales para desempeñarse en sus cargos pues en la actualidad muchos de los mandatarios que poseemos no cumplen con nuestras expectativas o las llenan pero en porcentajes muy bajos.

Y así mismo se busca el dirigente o guiador del pueblo, una persona que no solo quiera el poder si no que tenga una razón de hacerlo para que sus cambios sean innovadores y puedan ayudar en todos los aspectos para mejorar la sociedad de hoy. Deseamos encontrar dirigentes ante todo honestos, conciliadores, respetuosos, amables, que posean un excelente sentido de justicia y equidad, y principalmente con muy buen control emocional. También deben poseer valores como: ser sencillos, respetuoso, tener visión, alegría, humildad y personalidad. “Debe tener confianza en sí mismo,  comunicación efectiva, opiniones unificadas, un justiciero, comprometido con la causa. Debe también ser afectuoso, afable, tener facilidades de acercarse a los demás. El líder trasforma las cosas en nuevas”.

En este sentido aquello que los impulsa a ansiar el poder sea el deseo de ayudar a su pueblo a mejorar en diferentes aspectos, pero en la actualidad algunos candidatos se sienten impulsados a llegar al poder, pues, este les representa las ganancias de grandes cantidades de dinero y no piensan en ayudar a las personas que los eligieron y por las cuales ocupan los cargos que les fueron asignados por voto popular.

Muchos quisiéramos encontrar mandatarios de la talla de algunos dirigentes de la historia que en algún momento fueron líderes de una nación, y hoy en día son recordados y sus nombres han sido escritos en letras doradas gracias a las acciones que han emprendido durante sus funciones beneficiando a su pueblo.

La labor que han hecho antes, durante o después de su mandato, permitió el progreso en sus países, dándoles estabilidad política, económica o social. Los siguientes son ejemplos de dirigentes influyeron positivamente sobre su pueblo.

Benito Juárez. Este hombre fue presidente de México en varias ocasiones durante 1857 -1872, Su importancia social y política se centra en la defensa de la Soberanía Nacional; su capacidad diplomática le valió un reconocimiento latinoamericano.

Abraham Lincoln. Siendo presidente de Los Estados Unidos (1861-1865) dentro de un contexto todavía esclavista, fue uno de los principales oponentes de esta práctica inhumana. Tiene el reconocimiento de haber liberado a los esclavos mediante la Proclamación de Emancipación.

Nelson Mandela. Fue el primer presidente elegido de forma democrática en Sudáfrica, en 1994. Mandela es muy recordado por la defensa que hizo de los derechos humanos, sobre todo en las cuestiones raciales, las cuales existían con gran fuerza en su país. Recibió más de 250 premios y reconocimientos internacionales durante cuatro décadas, incluido, en 1993, el Premio Nobel de la Paz. Antes de ser mandatario, estuvo preso 27 años.

Franklin D. Roosevelt. Presidente de Los Estados Unidos de 1933 a 1945. A Roosevelt le tocaron épocas muy complicadas para su nación, pero su política de New Deal, permitió la confianza entre los norteamericanos y salir de la crisis económica del 29. Logró la unión entre los estadounidense en un momento de crisis extrema económica y social, con lo que pudo estabilizar a la nación y salir avante. De hecho, esto les permitió estar en la Segunda Guerra Mundial, de la que salieron en hombros como los nuevos héroes del mundo occidental.

Un gobernante actual, es Luis Ignacio Lula Da Silva, quien fue presidente de Brasil de 2003 a 2011. Este personaje cuenta con raíces sindicalistas, sobre todo del movimiento obrero, y fue candidato a la presidencia en cinco ocasiones. Su importancia radica en que durante sus ocho años como jefe de estado, a Brasil le dio estabilidad económica; la convirtió en una potencia mundial; siendo actualmente, la principal potencia económica de América Latina.

Además, Da Silva impulsó muchas reformas sociales que beneficiaron al pueblo y abrió el espacio para que una mujer de izquierda llegara a la presidencia de Brasil.

Sir Winston Churchill. Fue primer ministro de Reino Unido durante la Segunda Guerra Mundial (1940-1945) y posteriormente (1951-1955); es considerado uno de los principales estadistas del siglo XX.

Este mandatario es sumamente polémico, debido a que involucró a Inglaterra de forma muy fuerte en la guerra, pero también unificó a su país. Mantuvo una estabilidad económica y social durante el conflicto bélico y posterior a éste.

Isaac Rabin (Yitzhak Rabin). Él fue Jefe del Estado Mayor y Primer Ministro de Israel; su principal logro fue haber obtenido los Acuerdos de Oslo, que son los pactos de paz entre Israel y Palestina que firmó con Yasser Arafat. Lo sobresaliente, es que un israelí permitió el avance en los acuerdos de paz con Palestina cuyo conflicto parece eterno. Por esta acción le fue otorgado el premio Nobel de la Paz.

John F. Kennedy. A pesar de ser presidente durante muy poco tiempo, de enero de 1961 a noviembre de 1963, tres años; fue un gobernante muy popular, al que le tocó estar en medio de los conflictos de la Guerra Fría; además de mediar el movimiento de derechos civiles que encabezaba Martin Luther King.

Kennedy tuvo que hacer una valoración del conflicto que sostenía Estados Unidos con Cuba. Él fue quien dio la orden para que no se llevara a cabo la invasión y el bombardeo en contra de la isla; y así evitó una guerra.

Los anteriores son un gran ejemplo sobre lo que es un mandatario ideal, aquella persona que se auto-supera para realizar cosas beneficien a su pueblo, aunque en algunas ocasiones parezca que va contra la corriente. ¿Se puede tener en Colombia mandatarios ideales? Para responder esta pregunta tomaremos a Medellín como modelo. Esta ciudad se destaca como una de las que más han superado sus obstáculos luego de un periodo muy difícil de violencia y narcotráfico. Medellín es exitosa no solo en el ámbito comercial, también por la manera de alcanzar logros en la atracción de inversión, la transformación productiva y el fortalecimiento de la competitividad regional. Además, particularmente en Medellín, el desempeño de la gestión local es uno de los mejores, obteniendo buenos resultados en cuanto a la construcción de redes de confianza y respeto entre los grupos de interés local en busca de una transformación positiva de la ciudad. Esto tiene que ver, en parte, con la planeación de largo plazo y la mayor participación ciudadana en estas instancias. 

Medellín es la ciudad latinoamericana que se toma como ejemplo para ilustrar cómo el mayor dinamismo de los gobiernos locales y la construcción de nuevas estructuras de gobernanzas con el sector privado, concebido con un sentido amplio y participativo, permiten implementar estrategias de desarrollo local que impulsan la transformación socioeconómica de regiones y ciudades en periodos de tiempo relativamente cortos.

Para nadie es un secreto que todos los manizaleños soñamos con el mandatario ideal con las cualidades e ideales innovadores y sobre todo inclusivos, que cambien de manera integral a la ciudad, una persona que se interese genuinamente por lograr la igualdad entre los ciudadanos, que mantenga la legalidad, el orden, que resguarde ante todo los derechos humanos y sepa escuchar las opiniones de su pueblo, al igual que tenga el poder de afrontar crisis y buscar una solución conveniente para potenciar y catapultar a Manizales para que sea una de las mejores ciudades de Colombia y el mundo. Llevando a si la erradicación de problemas socioeconómicos y sociales como el alto índice de desempleo o informalidad, la violencia en sus distintas formas, el embarazo en la adolescencia (que apoye proyectos como tú decides), el enorme déficit de vivienda (la pobreza) y el alto consumo de alucinógenos en sobre todo en los niños y los jóvenes.

Manizales merece un mandatario que no solo ame el poder, sino que ante todo AME SERVIR.